Hace pocos días conocí, aquí en Madrid, a Stefan Dick Kassotche Mphiri, un joven diplomático mozambiqueño que ama el jazz, la buena literatura y la filosofía. La empatía fue inmediata: aquél hombre con camisa de colores y sonrisa franca me hizo recordar un querido amigo ya desaparecido, Ramsés Ramos. Ambos parecían compartir gustos y, principalmente el amor a la vida.
Stefan me empezó hablar de sus vivencias en las embajadas a donde fue destinado: Australia, Etiopía, Indonesia y ahora España. Países interesantes vistos por los ojos de este filósofo que hizo una tesina (en Australia) sobre Nietzsche, cuyo pensamiento bien resume como el creador del “superhombre, término final de la superación del hombre para el que nosotros (los hombres del presente) tan sólo somos un puente, la transición, la cuerda floja que está extendida entre el animal y el superhombre”.
Stefan me regaló su último libro, “Inventario Pasional” Ed. Slovento, Madrid, 200) que, como declara Ana Mafalda Leite (de la Universidad de Lisboa) “es una narrativa de simulación autobiográfica, en primera persona, de una historia de vida, amorosa, un relato de múltiples ligaciones, cuyas narrativas van surgiendo ante el lector a la manera del Decamerón de Bocaccio”.
“Inventario pasional” está escrito bajo el pseudónimo de Florentino Dick Kassotche. Esta obra muestra que Mozambique – la “terra da boa gente” – es una verdadera fábrica de buenos escritores y de buenas personas.
Pablo Villarrubia Mauso
Madrid, 07 de junio del 2009
7 hours ago
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